jueves, 21 de febrero de 2013


“En la región de los montes Altai (Sur de Siberia), un lugar donde pervive el chamanismo de origen femenino más antiguo, reconocen la llegada de la menstruación como el momento en que una mujer puede vivir el goce del sexo, el orgasmo como un modo de iluminar la conciencia y expandir la energía (aun cuando la actividad sexual sea en soledad). Creen que la sangre menstrual es la única que el cuerpo expulsa sin acto de crueldad ni heridas y es una representación de un reinicio de ciclo cada mes. Esta sangre es sagrada para quienes adoran a la Diosa (la Tierra) y se la ofrendan. Se celebra con una fiesta tradicional para dar inicio a un periodo de profunda sensibilidad en el que las mujeres estarán más perceptivas que nunca para consultar oráculos y confiar en las visiones y la intuición; un don femenino. Suponen que la Madre Tierra devuelve a sus mujeres la energía a través de la vulva, por lo que danzan desnudas sobre los campos sembrados para fertilizarlos.
[…] El pueblo apache rinde un culto amoroso a las chicas que comienzan a menstruar a través de la ceremonia de Sunrise. Durante cuatro días se celebra la unión de la chica con la Madre Tierra a través de danzas, cantos, ritos sagrados y regalos; es pintada de blanco y con arcilla para que la bendición de la tierra recaiga sobre ella. A partir de ese momento, a la mujer se le considera poderosa y bendecida por su fertilidad. Una verdadera fiesta que hasta la fecha se sigue practicando.” Mitos de la menstruación

* “Los pigmeos del Zaire celebran las primeras menstruaciones de las chicas con una gran fiesta de gratitud y alegría. La mujer joven experimenta el orgullo y el placer, y todo el grupo demuestra su felicidad.” John Zerzan, “Futuro primitivo”


* “En muchas culturas amazónicas la llegada de la primera menstruación en las jóvenes indígenas resulta un acontecimiento relevante en la aldea y es acompañada de celebraciones.” Wigberto Rivero Pinto, “La sexualidad en los indigenas amazónicos”

original en :  Europa Indigena
 
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